MANERAS DE MANTENER LA BILIRRUBINA


La bilirrubina corresponde a una sustancia o pigmento de color amarillo o anaranjado, cuya evaluación médica ayuda a conocer el buen o mal funcionamiento de nuestro hígado.

Al igual que cualquier otra sustancia en nuestro cuerpo, es importante mantener los niveles de bilirrubina controlados, a fin de garantizar un excelente estado de salud, en lugar de graves complicaciones. Para ayudarte con eso, hemos decidido brindarte algunos consejos que te servirán para estabilizar tus valores de bilirrubina.

¿Cuáles son los valores correctos de bilirrubina en el cuerpo?

En primer lugar, debemos conocer cuáles son los valores adecuados de bilirrubina en el cuerpo, los cuales se expresan de la siguiente manera:

  • Bilirrubina directa: entre 0 y 3 mg/dl.
  • Bilirrubina indirecta: menos de 1.0 mg/dl.
  • Bilirrubina total: entre 0.3 y 1.9 mg/dl.

¿Cómo mantener los niveles de bilirrubina?

Mantener los niveles de bilirrubina dentro de un rango saludable es fundamental para el buen funcionamiento de tu cuerpo. Aquí hay algunas estrategias que te pueden ayudar a mantener tus niveles de bilirrubina bajo control:

  • Mantén una dieta saludable: Consume alimentos ricos en nutrientes y equilibrados, incluyendo frutas, verduras, granos enteros, proteínas magras y grasas saludables. Evita los alimentos procesados y ricos en grasas saturadas, ya que pueden afectar negativamente la función hepática.
  • Bebe suficiente agua: La hidratación adecuada es esencial para que los sistemas de tu cuerpo funcionen correctamente, incluyendo el hígado y los riñones. Asegúrate de beber suficiente agua a lo largo del día para mantener una buena función renal y ayudar en la eliminación de productos de desecho, como la bilirrubina.
  • Evita el consumo excesivo de alcohol: El consumo excesivo de alcohol puede dañar el hígado y afectar su capacidad para procesar la bilirrubina. Limita tu consumo de alcohol o evítalo por completo si tienes problemas hepáticos o bilirrubina alta.
  • Haz ejercicio regularmente: Mantener un estilo de vida activo y hacer ejercicio de forma regular puede mejorar la salud del hígado y reducir el riesgo de enfermedades hepáticas. Además, el ejercicio puede ayudar a controlar el peso, lo que también es beneficioso para la salud del hígado.
  • Controla tus medicamentos: Algunos medicamentos pueden afectar la función hepática y alterar los niveles de bilirrubina. Si estás tomando medicamentos, consulta a tu médico para asegurarte de que no estén contribuyendo a niveles elevados de bilirrubina.
  • Incrementar el consumo de frutas desintoxicantes y depurativas como la piña, las naranjas y las uvas.
  • Restringir el consumo de alimentos altos en azúcares, harinas refinadas, huevos, leche de vaca y sus derivados, carnes rojas, alimentos procesados, embutidos y frituras.
  • Incorporar abundantes vegetales, cereales integrales y aceites vegetales a la dieta.
  • Beber infusiones depurativas como las de alcachofa, té de cardo mariano y diente de león.
  • Incluir zumos o batidos verdes en la dieta, especialmente aquellos con aloe vera, zanahoria, tomate, alfalfa y apio.
  • Vigila tus niveles de bilirrubina: Si tienes antecedentes de problemas hepáticos o de bilirrubina alta, es importante que realices chequeos médicos regulares y te hagas análisis de sangre para controlar tus niveles de bilirrubina.
  • Descansar lo suficiente, durmiendo entre 7 y 8 horas al día y evitando someter el cuerpo a situaciones de estrés.

Si bien estas medidas pueden ayudarte a mantener tus valores de bilirrubina, es recomendable que acudas a un especialista médico si percibes niveles anormales de esta enzima en una analítica sanguínea, él se encargará de realizar el debido diagnóstico y de recetarte el tratamiento más adecuado según tu condición.